El proyecto fondart regional de Santa Rosa de Lima en Pelequén es una puesta en valor de la festividad religiosa tradicional de la región. La antigua hacienda El Tambo y sus alrededores convertidos hoy en la comuna de Malloa fueron el lugar donde comenzó la construcción del santuario, en medio de zonas inundables y de extracción de la piedra de Pelequén
El proyecto se publicará a través de un libro, con lanzamientos en Malloa y San Fernando, en marzo de 2025. El equipo lo componen Catherine Valenzuela M. Historiadora, Jasna Ivusic Sociológa y Karen Fuentes fotógrafa.

La Parroquia de Santa Rosa de Lima en Pelequén es un santuario que congrega a diversas realidades culturales tradicionales de la región de O’higgins, desde el siglo XIX. Las formas de peregrinar han ido transformándose, en el comienzo acampaban en los cerros en dónde aparecen los primeros comerciantes alrededor del templo.
Luego las mandas y el caminar a Pelequén fueron parte del sacrificio para el milagro. Posteriormente se masificó la peregrinación con la estación de tren y hoy en día el auge del comercio, a pesar de la falta de conectividad, se convierten en un cluster económico de relevancia para los meses de agosto y septiembre.

Los días de peregrinación comienzan el 30 de agosto, todos los años, en la cual, el comercio ocupa las calles, llegando las últimas novedades del mercado, la artesanía en piedra rosada de Pelequén, y las imágenes de santos importados desde Arequipa Perú. Esto lo convierte en un centro de religiosidad que comparte espacio con expresiones culturales de ferias provenientes de la época colonial del mundo andino. La presencia de comerciantes peruanos con las esculturas de arte religioso y la influencia del barroco andino, iluminan los días en que están por las calles de Malloa